MEDIR, MOVER Y PROGESAR

Para evaluar la fuerza del hombro, se necesitan herramientas confiables y válidas que permitan mediciones repetibles a lo largo del tiempo. Descubra un método de 3 puntos para evaluar la fuerza del hombro de sus pacientes con la mejor reproducibilidad posible.

El dolor de hombro casi siempre está relacionado con una debilidad del manguito de los rotadores (consecutiva o en el origen del dolor).
El manguito rotador es un conjunto de músculos (subescapular, supraespinoso, infraespinoso y redondo menor) que aseguran la estabilidad del hombro , y también de sus componentes rotacionales. Estos son músculos caprichosos, que no toleran mucho las grandes variaciones de carga. Por lo tanto, es importante que sean fuertes para tolerar mejor las limitaciones de la vida cotidiana y los deportes.

Realizar una prueba de evaluación de la fuerza del hombro

¿Cómo realizo una prueba de evaluación de fuerza con un dinamómetro de presión de calidad?
1. Primero, necesitamos estandarizar la aprobación de la prueba (establecer las condiciones para aprobar la prueba).
2. A continuación debemos comparar las lecturas con el lado opuesto (de lo contrario, no tenemos datos para comparar).
3. Cuanto más fija esté su mano (que sostiene el dinamómetro) (bastante compleja a veces), más confiable será el valor (porque no compensará de manera diferente cada vez empujándose más o menos fuerte  contra la persona que está siendo evaluada). Todas estas indicaciones están detalladas en la aplicación móvil Kinvent Physio, que te acompañara y guiara a diario en tus mediciones.

Ya se ha demostrado la correlación entre la fuerza de prensión y la fuerza de los rotadores laterales. Descubra cómo se puede utilizar la evaluación de la fuerza de prensión para analizar la capacidad de reclutamiento del manguito rotador.

Para acercarnos al lado “clínico”, en pacientes con dolor de hombro relacionado con el manguito de los rotadores, la fuerza de prensión del lado con el hombro dolorido se reduce en comparación con la del lado sano (Kachanathu, 2019). Sporrong ya había vinculado la fuerza de prensión y la activación del manguito rotador a mediados de la década de 1990 (Sporrong, 1996).

HIPÓTESIS SOBRE EL VÍNCULO CON EL MANGUITO ROTADOR
El sistema neuromuscular buscaría, por tanto, estabilizar la muñeca, el codo y el hombro con una contracción muscular global, para transmitir mejor las fuerzas. Todo esto, sin embargo, son solo hipótesis para explicar el aumento de la actividad del manguito rotador cuando activamos el agarre con mucha fuerza.

Por lo tanto, sería relevante pedirles a sus pacientes (o clientes) que aprieten la carga o la herramienta que usan con mucha fuerza en los ejercicios dirigidos a su manguito rotador.

La formación en movilidad es un proceso a largo plazo. 

De hecho, planificamos de la misma manera que lo haríamos para la fuerza o la resistencia. 

1 Automasaje (30 seg a 1 min)

Este primer paso relaja los tejidos blandos y reduce toda la resistencia del cuerpo al movimiento. Lo que estamos haciendo aquí no es rastrear el dolor y luchar contra las adherencias. Realizamos un trabajo de relajación, a corto plazo y localizado. Este proceso prepara los músculos y tendones

2. Estiramiento (1 minuto) 

El segundo paso es el más importante en la búsqueda de una mayor movilidad. Este es el estiramiento destinado a ganar la máxima amplitud articular. De hecho, estamos hablando de estiramientos de rendimiento de alta intensidad.

3. Reprogramación de motores 

Este tercer paso en el entrenamiento de la movilidad tiene como objetivo la reprogramación motora. En este caso, se trata de poner el movimiento controlado en el centro del protocolo, o la amplitud y la fuerza al servicio del movimiento.

4. Fase de carga

La movilidad no es solo flexibilidad. Fase 2 desarrolla la flexibilidad y la fuerza de forma conjunta y local. Sin embargo, una carga de peso global en un movimiento más completo contextualizará los niveles de fuerza y promoverá su transferencia al movimiento.